Agua y naturaleza, elementos esenciales para el ser humano que, desde tiempos ancestrales, se han celebrado por medio de rituales y artesanías y misticismos.
En un deseo del coreógrafo Diego Vega Solorza por crear reconociendo, surge una obra de danza que se teje con música y pintura para conectar con el agua como puente sagrado entre el terreno humano y el espacio divino.
La obra incluye música original en vivo de Rafael Durand, un telón pintado por Fernanda Caballero y un diseño escenográfico
creado por el estudio creativo COMUNAL. El vestuario fue diseñado por Arturo Lugo. El equipo se complementa con Juan Carlos Estrada como asistente de coreografía, Frank Vázquez como asistente de producción, Brenda Cárdenas como asistente de vestuario y Brenda Loustaunau en organización y gestión.
Para conocer más sobre las iniciativas de sustentabilidad y responsabilidad social de Tequila Don Julio y Diageo, explora el informe ESG.