Esta nueva celebración del verano enmarca el legado de Gucci en cada pieza. La libertad se encarna en los colores y las texturas se intensifican para expresar el sentimiento esencial de la temporada. Inspirada en el encanto histórico de las playas costeras italianas, Gucci Lido captura la poesía serena de un encuentro sensorial plasmada en la luz del sol, la brisa del mar y los momentos espontáneos.
La fotografía, capturada por Jim Goldberg, explora un lente cinematográfico, donde la narrativa es protagonista. Mezclando imágenes espontáneas con su uso distintivo de reflexiones escritas, Daisy Edgar-Jones, Aliocha Schneider y David Jonsson se envuelven en las escenas veraniegas de aquella costa mediterránea.
Esta temporada, Gucci reinventa sus emblemáticas líneas de bolsas con materiales de temporada: los Gucci Softbit, GG Marmont y Bamboo 1947 llegan en rafia, mimbre o crochet. A su vez, los nuevos mocasines Gigi, confeccionados en ante, ofrecen una elegancia sencilla, mientras que un degradado de los tonos azules del mar le da color a accesorios y tenis, desde bolsas extragrandes hasta los tenis Gucci Re-Web. Algodones ligeros, denim con el monograma GG y el icónico motivo Flora encarnan un espíritu de sofisticación relajada, complementado por los nuevos estilos de Gucci Eyewear y la joyería con la G entrelazada que brilla con calidez de la temporada.
Así como en la vida, no existe un guión; todo fluye. Las amistades se encuentran, las risas florecen y el ritmo suave del mar acaricia a las rocas en reposo. Cada momento perdura lo suficiente para ser recordado, forjando una historia que resonará mucho después de que la temporada termine, siempre con la promesa de un nuevo comienzo.