ANCORA ha dejado de ser una sola palabra, engloba un sentimiento, un universo, un ensayo visual; de objetos, momentos, personas que dejan una marca. Sabato de Sarno genera un imaginario visual que se concentra en los detalles de la vida, aquello que resalta el cotidiano, haciendo extraordinario el hecho de existir.
La colección FW23 presenta siluetas estructuradas y fluidas, que crean un armario eterno para todos, para personas reales que desafían y desean. Con detalles imperdibles como los sacos que destacan una pequeña franja de color en las solapas, creando una ilusión de percepción, o algunos otros que presentan los codos y corrugados, la marca de una prenda en uso constante, una que existe y alberga muchas historias, sensaciones y emociones.
Cada prenda ha sido un deleite visual que refleja la sofisticación de la casa de moda, con un entendimiento de la sociedad moderna.
Según Sabato de Sarno ANCORA es; Una historia de alegría de vivir, de pasión, de humanidad, de personas, de la vida real, de glamour irreverente, de provocación, de confianza, de sencillez, de sentimientos y emociones inmediatas, de un tipo específico de arte, de palabras – palabras en obras de arte, palabras en imágenes, palabras en espacios… simplemente palabras. Una historia de riqueza y lujuria/deseo, de rojo pero también de azul y verde, de destellos, de espontaneidad, de luz, de una fiesta con las primeras luces del día, es una historia no oculta, es orgullosa, es manifiesta y no tabú, aunque parezca que debería serlo, es completamente gratuita y está llena de euforia. Es una historia de gente fabulosa y diversa; son imágenes Getty de gente interesante de todas las edades, y es inclusiva, ya que todos son bienvenidos. Es una historia de cine, de mi querida Italia, de intelectuales y de viajes por el mundo, pero sin dejar de sentirme como en casa esté donde esté. Una historia de objetos: brillantes, táctiles y fríos al tacto, pero cálidos para el corazón y el alma; se antoja coleccionarlos, no para un museo, sino para enriquecer la vida cotidiana. Es una historia de música y salidas nocturnas, de sudor, baile y canto. Es una historia de familia, de besos, muchísimos besos. Es una historia de todo, una vez más, pero esta vez expresada a través de la alegría.