Movimientos transparentes y libertad de habitar la piel. Estos valores refleja Lagoona, una marca de bikinis con identidad que establece su calidad con cada pieza.
Mariana Meehan, fundadora de la marca, encontró una posibilidad en su camino durante su estancia en Londres, cuando cursaba su maestría en el London college of Fashion. Gracias su facilidad en el marketing y creación de contenido, así como su amor y pasión por la moda, logró crear Lagoona.
Sentirse en paz con el propio cuerpo y en libertad de unirse con la tierra es el valor principal que impregna cada pieza de Lagoona.
Con la intención de crear piezas que fomenten la libertad, la playa, el mar y la vida tropical de Punta Mita ha sido su espacio de inspiración y referencia para sus colecciones.
El proceso de creación de Mariana no sigue un camino lineal. Cada colección de Lagoona, desde la primera a la más reciente, ha tenido su propio concepto, su propia historia. A veces aparece entre telas, otras desde algo que observó en la calle o en una pasarela. Todo sucede casi al mismo tiempo, como si los elementos visuales, las ideas sueltas y las texturas empezaran a hablar entre ellas. Así se van formando los modelos, que no buscan seguir una fórmula, sino capturar una sensación.
La primera colección obtuvo su nombre en una ráfaga de inspiración que habitaba con cada roce del agua y su piel: Manantial. Esa línea de trajes de baño fue inspirada en la conexión que existe entre la mujer y sus raíces en la tierra y en el agua dulce.
Después de aquel lanzamiento, Mariana sintió una urgencia por explorar una narrativa diferente, lo que la llevó a Sol, su segunda colección, con un tono mucho más playful y una vibra más acapulqueña. Los colores de las prendas llevaban tonos más intensos, como el rosa mexicano, naranja y amarillo.
Inspirada en la música disco, la energía que transmite la colección es un gozo total, una libertad de disfrutar un verano en la playa bajo el sol.
El bikini Selva, hoy una de las piezas más queridas de la marca, nació durante una etapa de experimentación con capas y volúmenes. Ese juego de superposiciones se transmitió en un traje de baño con doble top, doble bottom, fruncidos estratégicos. Inspiraciones que vienen del corset o de vestidos largos también se transforman en one pieces, pensados para no cortar el movimiento natural del cuerpo.
Bajo la Luna fue el concepto que la llevó a elaborar la tercera colección de Lagoona, logrando una conexión con la noche. Impregnada de colores como rojo, lila, negro, plateado y otros tonos metálicos, esta se trató sobre la rebeldía femenina natural. La esencia de un Night Swim: la libertad, diversión y fuerza del espíritu.
Y para el Atardecer, el ùltimo lanzamiento, se utilizaron colores más cálidos como el café, naranja quemado, amarillo, rosa y celeste, haciendo alusión a los infinitos tonos de un atardecer.
Lagoona ofrece piezas para llevar en un viaje, para celebrar una ocasión, o simplemente para sentirse bien en la propia piel.
Las piezas cargan consigo una energía muy especial, no solo por cómo se ven, sino por cómo están diseñados. Cada pieza tiene estructura, intención y un toque de autenticidad que permite encarnar el aura de quienes la porten.